El Museo de la Fresa, ubicado en Rancho La Cumbre, ha sumado un nuevo y simbólico atractivo: la escultura de la Fresa de Oro. Esta pieza emblemática representa no solo el orgullo de los irapuatenses por su tierra, sino también un tributo a la tradición agrícola de la ciudad, conocida nacional e internacionalmente como “la capital de la fresa.”
La ceremonia de inauguración estuvo encabezada por Lorena Alfaro García, presidenta municipal de Irapuato, quien expresó su reconocimiento y agradecimiento a Fidel Ramírez y Alejandra Ramblas, impulsores de esta iniciativa. “Proyectos como este refuerzan el orgullo de pertenencia a nuestra tierra fresera, crean espacios de aprendizaje, y son un punto de encuentro para las familias de la región,” declaró Alfaro. Agregó que esta escultura, además de enriquecer la oferta cultural del municipio, consolida a Irapuato como un destino turístico significativo en Guanajuato.
Con la escultura de la Fresa de Oro, el Museo de la Fresa se reafirma como un espacio de identidad y educación sobre la historia de la fresa en Irapuato, destacando el papel de esta fruta en la economía y cultura local. La Fresa de Oro simboliza los valores de trabajo y perseverancia que caracterizan a los habitantes de Irapuato, y espera convertirse en un ícono de la ciudad.
A través de este tipo de proyectos, el gobierno municipal continúa apoyando iniciativas que promuevan el patrimonio cultural y fortalezcan el sentido de pertenencia. La escultura también busca atraer a visitantes nacionales y extranjeros, invitándolos a conocer la rica historia de esta tierra y el proceso de cultivo que ha llevado a Irapuato a posicionarse en la industria agrícola.